domingo, 23 de diciembre de 2007
NO todo es lo que (SI) parece
que NO como carne o pescado
que NO quiero trabajar en los sectores de la construcción y del automóvil
que NO adquiero ropa en los comercios cada dos semanas
que NO remiendo mis pantalones rotos
que NO tengo calefacción y me aborrezco de frío estos días de niebla
que NO tengo aparato televisor
que NO uso teléfono móvil
que NO me afeito
que NO poseo un vehículo privado con motor de combustión interna
que NO compro productos ya cocinados
que NO acudí a mi cena de paso de ecuador
que NO acudí, tampoco, a la de fin de carrera
que NO quiero pagar un médico privado
que NO me producen ningún placer los parques de juego y ocio
que No creo en aquello que ahora empresarios y políticos llaman desarrollo sostenible
resulta
que SI me alimento con el sabor de otros lugares
que SI me produce un placer moral mi trabajo
que SI acierto a mostrarme como en realidad soy
que SI muestro con orgullo mis harapos
que SI comparto el calor que emana de las bibliotecas
que SI tengo tiempo para leer un libro
o dos si son pequeños
que SI considero que mi planeta es demasiado hermoso
como para parecer un horno microondas
que SI puedo mirarme cada mañana en el espejo
que SI pedaleo de un extremo al otro de mi entorno embargado de sonrisas
que SI aprendí a cocinar
que SI comparto mi saber culinario con quien me aprecia
que SI tomo de otros su saber culinario y lo pongo en práctica
que SI creo en una sanidad eficiente
que SI encuentro hermosos los escorpiones y las tarántulas
que SI soy sostenible
miércoles, 19 de diciembre de 2007
¿Por qué luchamos? (I) / Why do we fight for? (I)
Es necesario en cada momento hacer lo que uno considera correcto o, al menos, intentarlo. Eso supone, sobretodo, romper la línea que separa la teoría de la práctica. Las ideas no tienen capacidad transformadora. Suponen tan sólo un medio, el fin debe ser siempre la actuación. Nadie en su sano juicio sería capaz de afirmar que el planeta es un lugar perfecto en donde cada individuo puede desarrollar totalmente sus capacidades. Los más concienciados extenderían el concepto de individuo a los ecosistemas y sus integrantes. ¿Qué me diferencia a mi, entonces, de esas personas? El hecho de pretender que mis ideas se conviertan en acciones. Y, aunque bien es cierto que es complicado llevar algúnos planteamientos a la práctica, intentarlo no lo es. En el intento adquirimos nuestra dignidad de transformadores sociales. Por eso luchamos y, por eso, es preciso involucrarse en la modificación de la sociedad. Alcanzar el horizonte fijado supone una cuestión secundaria.
Del derecho al pataleo hablaremos otro día...
A good friend of mine wondered if it was any useful to work to change this society we are, one way or another, responsible for. It’s true this monster intimidates you. Every day you do your best to modify its trajectory and check it’s still walking the same mistaken path. Throughout the years you see how some mates quit. Maybe because the task looks more like a mad people’s job. Or maybe, because of tiredness. Faith is an unusual feeling which disappears in the same difficult way to understand it comes up. Even though, in this context, faith has no religious connotation and it is based on strong political, social and ecological approaches –assuming we could be wrong-. In fact, even those who quit are conscious the flags they once raised still have thir place now. They just don’t feel the struggle compensates their time, motivation or worries. I am sure all of this is about answering the question: what do we fight for?.
It’s necessary, in every moment, to do exactly what you think is correct or, at least, to try it. That means, above all, breaking the practice-theory line. Ideas can’t change anything. They are just the mean, the aim must always be acting. Nobody can assure planet Earth is a suitable place in which every human being can make the most of every ability he has. This should be extent to ecosystems and animals. ¿What are the differences between me and that people who believe having ideas is enough? The fact I pretend my thinking to be taken to actions and, although, certainly, it’s uneasy to take some approaches to practice, trying it it’s not. When we try we acquire our social transformers dignity. That’s why we fight for and, therefore, that’s why it’s important to get involved in the society transformation. Reaching our aim it’s a secondary matter.
About the right to get angry we’ll talk some other day...
miércoles, 5 de diciembre de 2007
La bicicleta como transformadora
A pesar de todo esto, mis derechos como usuario de la vía pública no son reconocidos. Soy increpado cada viaje para dejar mi espacio a los automóviles. Incluso cuando circulo de un modo defensivo ocupando todo el carril, estos me adelantan muy cerca. Sufro acelerones, ruidos y frenazos. En definitiva se me imponen una movilidad y una normativa de tráfico pensadas en exclusiva para el automóvil.
Si yo me muevo en bicicleta todo se transforma. Mi dependencia energética se reduce de modo drástico. La atmósfera de mi entorno es saludable. Se reduce el espacio destinado a los automóviles y aumenta el que puede ser disfrutado por todos los usuarios de la vía pública. El poder económico de las transnacionales del automóvil es sustituido por cooperativas de producción de bicicletas. En definitiva, un nuevo concepto asociado al urbanismo y la movilidad se extiende impregnando cada sector socioeconómico.
martes, 4 de diciembre de 2007
Comunicado de Casas Viejas
¿Pero no era Venezuela una dictadura?
La pasada semana, haciendo una lectura muy breve de la prensa diaria, me extrañó leer que en Venezuela se había permitido una manifestación contraria a la reforma constitucional promovida desde el ejecutivo. Como suele ser habitual en estos casos, por extensión, la marcha también se posicionaba de un modo radical en contra de Hugo Chávez. Siempre había creído que, más allá de definiciones académicas, una de las características más visibles de las dictaduras es que prohibían cualquier manifestación no acorde con la línea ideológica del dictador.
Resulta que, navegando por la red, comienzo a comprender los intereses financieros y empresariales que Europa –donde ponga Europa podemos sustituir por España- tiene en Iberoamérica. También leo en otras páginas que Hugo Chávez pretende implantar un sistema socialista que, a juzgar por ciertos párrafos, no tiene nada que ver con experiencias del pasado; parece ser que se garantiza el respeto a la propiedad privada. Así que lo que empiezo a intuir es que alguien tiene mucho interés en desacreditar la labor del presidente de la república y que a los periódicos, las emisoras de radio o las televisiones no les ha supuesto conflicto ético alguno ponerse a su servicio.
Lo indignante es estos medios de comunicación, tan impresentables, tan al servicio de la oligarquía económica y tan miserables en su fondo y en su forma, no convengan ahora en desdecirse y admitan que no nos han contado toda la verdad, o que nos la han contado mal. Y que expliquen por qué nos han retratado de esta forma la situación política en Venezuela. No lo harán, sin embargo. Profundizarán, en la derrota del “Si” para empujar el próximo revocatorio y expulsar a Hugo Chávez de la presidencia del país y nos pretenderán convencer de que todo se ha hecho en nombre de la democracia y de un planeta más libre. Lo más curioso, que alguien sometido a factores externos pretenda darnos a los demás lecciones de libertad.
Las ilustraciones son de Allan McDonald y de Gervasio Umpiérrez